Año nuevo y sigue el anticiclón sobre nuestras cabezas, sin permitir siquiera que nos roce algún frente Atlántico que mejore la paupérrima situación nivosa del Pirineo. Además de la escasez de precipitaciones, las altas temperaturas en media/alta montaña en muchas jornadas ha dejado todas las orientaciones sur con una innivación muy pobre, más propia de principios de junio que de pleno mes de enero. Las orientaciones norte se mantienen nevadas desde unos 1800/1900 m, aunque los espesores son ridículos incluso en cotas altas, siendo a día de hoy muy difícil encontrar zonas que permitan el esquí de montaña en el Pirineo occidental (y en prácticamente todo el Pirineo). Durante los próximos días una masa de aire frío procedente del interior de Europa hará bajar las temperaturas, esperándose tan sólo algunas nevadas débiles al norte de la divisoria, por lo que, al menos a corto plazo, el grifo del Atlántico seguirá cerrado.
Mañana miércoles se espera una jornada puramente invernal, con cielos prácticamente despejados en la vertiente sur, en donde se espera viento fuerte de componente norte. Al norte de la divisoria se espera abundante nubosidad, con algunas nevadas débiles, acumulando en el mejor de los casos 4/6 cm de nieve. Temperaturas en claro descenso, oscilando entre -6/-1ºC a 1500 m y entre -10/-3ºC a 2200 m. Iso 0ºC a 1100 m.
El jueves será la jornada más fría de la semana. Se esperan de nuevo cielos prácticamente despejados en la vertiente sur, con intervalos nubosos en la vertiente norte, en donde podría caer alguna nevada débil. Seguirá soplando fuerte el viento de norte en toda la vertiente sur. Temperaturas en descenso, en una jornada puramente invernal, oscilando entre -8/-4ºC a 1500 m y entre -12/-7ºC a 2200 m. Iso 0ºC a 700 m.
Situación sinóptica prevista para este próximo jueves. El día será muy frío en todo el Pirineo con la llegada de una masa de aire frío procedente del interior de Europa. No se esperan nevadas de gran interés en el Pirineo occidental. La zona más beneficiada será el Valle de Arán y el norte de Andorra, en donde podrían caer 10 cm de nieve.
El viernes será una jornada soleada en ambas vertientes, con tan sólo algunas intervalos nubosos de escasa importancia en el lado francés. El viento amainará en la vertiente sur, registrándose algunas rachas moderadas. Temperaturas sin grandes cambios, oscilando entre -7/-3ºC a 1500 m y entre -10/-5ºC a 2200 m. Iso 0ºC a 700 m.
El sábado se espera una jornada soleada y estable en ambas vertientes del Pirineo occidental. Al final del día aumentará la nubosidad al norte de la divisoria. Temperaturas en claro ascenso, oscilando entre -4/2ºC a 1500 m y entre -7/-2ºC a 2200 m. Iso 0ºC a 1300 m.
El domingo la llegada de un frente poco activo podría dejar algunas precipitaciones débiles en la vertiente norte y divisoria, en forma de nieve a partir de 1400 m. En la vertiente sur se esperan algunos intervalos nubosos, sin descartar alguna precipitación débil y aislada cerca de la divisoria. Temperaturas oscilando entre -3/2ºC a 1500 m y entre -6/-2ºC a 2200 m. Iso 0ºC a 1700 m.
La próxima semana comenzaría con tiempo estable y anticlónico, con temperaturas en ascenso, regresando de nuevo las inversiones térmicas y las heladas intensas en los fondos de los valles.
En cuanto a la innivación, esta sigue siendo muy escasa para la época del año en todo el Pirineo occidental, siendo más propia de un mes de junio que de pleno mes de enero. En orientaciones norte la nieve presenta cierta continuidad desde los 1800/1900 m, con espesores que apenas alcanzan los 25 cm a 2200 m de altitud, superándose tan sólo los 50 cm en cara norte por encima de 2700 m. En cara sur la situación es dantesca, excepcional, con tan sólo cierta continuidad en el manto por encima de los 2500/2600 m.
Esperemos que más pronto que tarde lleguen las tan ansiadas nevadas, por ahora, toca esperar...
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